martes, 19 de julio de 2011

NADA EXISTE, HASTA QUE DECIDES CREER Por: Aandrea Vogt


Algunas personas adoptan filosofías ajenas a su propia cultura e incluso, cambian de religión. Como quienes se convierten al Budismo (por mencionar alguna), pues en ella encuentran aspectos que les es más fácil digerir, a diferencia de otras religiones que exigen creer en dogmas de fe, o en un infierno para los malos y un cielo para los buenos y ésta, es la primera “etiqueta” que se le cuelga a un ser humano.

Otros, buscan las respuestas en libros, talleres, cursos y hasta en el Internet. Unos más, practican todo tipo de rituales esotéricos o bien, siguen a maestros o gurús, consultan el tarot, el péndulo, el horóscopo, etc. En su “búsqueda” hacen uso de todo lo que se oferta en el impresionante “mercado espiritual” que existe hoy en día en todo el Planeta.
Esto está bien, todo ayuda, sin embargo, sigue faltando “algo”.
Hace unos días, leía a alguien que afirmaba haber descubierto (¡por fin!) que es un Índigo. Su descubrimiento lo basaba en un “test” que encontró en Internet y que al responderlo (después de más de 54 años de habitar en este Planeta) supo que es Índigo porque “encajaba” en todos los conceptos que manejaba dicho test.
Aquí es importante considerar lo siguiente: si utilizamos el “buscador” más famoso en el Internet encontraremos: About 18,200,000 results (0.12 seconds) sitios web que ofrecen “test Índigo” y sobre el tema Índigo en general aparecen: About 125,000,000 results (0.14 seconds).
¡Wow!... ¡ardua tarea!… ¿no creen?... y la cuestión es: ¿Cómo saber a cuál de estos millones de sitios le confiamos nuestra identidad y el significado de nuestra existencia? ¿Cómo saber cuál de estos sitios nos ofrece información confiable sobre nuestra misión en la vida? ¿Cómo encontrar el verdadero sentido de nuestra existencia entre la información que nos ofrecen tantos millones y millones de sitios en el Internet.
¡Está difícil!... digo, porque si en todos los años que hemos vivido en este Planeta no lo hemos descubierto, ¿por qué pensar que en menos de veinte segundos y gracias a un sitio web vamos a descubrirlo?