jueves, 13 de noviembre de 2008

EL SILENCIO, UN SENDERO DE LUZ

Cuando mas observo nuestro modo de vida mas que convezco de la necesidad del silencio como disciplina para lograr contatcos internos que nos revelen las verdaderas ocultas de nuestra naturaleza divina y nos muestre el sendero hacia los planos de la luz.

Los ruidos nos siguen por todas las partes, ruidos de maquinas extridentes, voces que en vez de hablar gritan. Y nosotros, sin danos cuenta, vamos elevando la voz y nos sumamos al ruido contaminante que todo lo penetra y va cerrando las puertas internas que nos conectan a nuestro ser.

El esta esperando para habitarnos. El trabajo de los circulos superiores esta listo esperando que el ser humano genere un espacion en donde descender. Nuestro Ser Superior no puede manifestarse hasta que la personalidad haga el trabajo correspondiente. Y este trabajo necesita el silencio como base para desarrollarse.

El objetivo de la meditacion es lograr un silencio interno y una paz tan profunda que podamos unirnos a nuestro ser Superior, la quintaesencia de Dios mismo y entonces participar en la vida del cosmos, nuestro verdadero hogar. La Tierra viaja por el espacio eterico y nosotros sus habitantes, recorremos verdaderas estrellas,

La realidad del Coosmos es un iman que ha guidado mi vida. Recuerdo lo que sentia cuando niña, al mirar las estrellas. Era un gozo casi fisico, porque me desplazaba y mi mente creaba hermosas fantasias. Creo que esto me hizo ser una niña ausente, silenciosa. Lo fui perdiendo a medida que fui creciendo, quizas porque las luces de las ciudades ocultaban las estrellas, quizas porque el sentido de asombri de la niñez que se pierde de adulto, no lo se.....pero se me quedo en el alma el recuerdo imborrable de ese desplazarme por el cosmos, de ese fluir libre, libre. Ahora me doy cuenta que fueron mis meditaciones infantiles, porque el silencio que se logra en la meditacion permite ese desplazamiento, ese circular libre tan parecido a aquellas sensaciones de la niñez, nostalgicas que quedan grabadas en el alma humana.

Somos seres cosmicos, sumergidos en un mar de tejidos, huesos, instintos, emociones y pensamientos que nos ocultan a nosotros mismos. Nuestra conciencia se fragmenta entre oceanos de nombres,detalles, personajes de la vida material. Vamos en pos de lo divino a traves, de lo externo, de la personalidad del Maestro que nos guia,sin darnos cuenta que lo que necesitamos es un silencio profundo para encontrarnos a nosotros mismos como la Conciencia Maestra que todo lo abarca y que habita en la unidad de la vida.

Que es lo mas importante que el Maestro nos da es el profundo campo de la neutralidad que se forma a su alrrededor cuando nos otorga el regalo de su presencia y nos auspicia para que podamos lograr el contacto interno.

Y nosotros hablamos, hablamos y hablamos......y esperamos que nos hablen. Parece que es obligacion hablar cuando nos juntamos porque no sabemos compartir el silencio. Recuerdouna vez que fuimos a visitar a un ser muy especial cuya practica espiritual comtenpla el silencio y la vigilia como pilares fundamentales. Y uno de los compañeros del grupo no paro de hablar. Hablo y hablo de cosas sin importancia porque no comprendio que estabamos alli para compartir el silencio y de esta manera, poder comunicarnos desde el alma. Confieso que hasta visualice una mano color violeta que le tocaba la boca a ver si se callaba pero no funciono. Fue una oportunidad perdida que todavia lamenti......

Vivimos una vida tan ruidosa que necesitamos,de tanto en tanto hacer retiros, convivencias en sitios de paz y silencio. Si tomamos conciencia que,como humanidad somos el centro laringeo del Señor del Mundo, del Logos Planetario, tendriamos que tener sumo cuidado al hablar y hacer uso de un poder divino que se nos ha otorgado.

Cuando la persona va acercandose mas al alma, a su ser superior, mas necesidades tiene de silencio y mas le atormenta los ruidos.. El ruido mantiene a los seres humanos en las regiones bajas de la psique humana y nos previene de entrar al mundo sutil. Que el silencio es el lenguaje de la perfeccion mientras que el ruido es la expresion de un defecto o una anomalia, o el reflejo de una vida desorganizada y anarquica. Y añadia que en la presencia del ruido su unico deseo era abandonar el lugar e irse lo mas lejos posible.

¿Como cultivar el silencio?. Una disciplina sugerida es escuchar musica. Seguir cada nota, cada instrumento con tanta atencion que nos permita acallar nuestros pensamientos. Tambien se sugiere el canto. Por supuesto que hablamos de musica que nos eleve, de los grandes compositores, no de musica de rock, salsa o merengue.

Otro metodo es escuchar los sonidos de la naturaleza. Ellos resaltan el estado del silencio en el que ella se encuentra.

En el silencio y solo en el silencio podemos sentir que la vida circula en una eterna danza y que nos une a unas redes magicas que expresan en sus diseños maestros la divina destreza del Dios del Universo.

Que puedas recibirlo en lo profundo de tu ser y descubrir en tu silencio que somos uno.

CON AMOR PROFUNDO.
Anonimo.

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