viernes, 7 de mayo de 2010

Reflexion del dia, Perdonarse


"Nadie nos hace daño, somos nosotros mismos haciendonos daño en un nivel inferior.."


Amo mi pasado con todo lo que paso, por que gracias a ello soy la mujer que soy.
 


En la mayoría de las ocasiones no nos damos cuenta, debido al ruido interno, que lo que le damos, o creemos que le podemos hacer a otros [que realmente no les podemos hacer nada] es lo mismo que nos damos y nos hacemos a nosotros mismos, que cuando le negamos el perdón y el amor a otros nos los estamos negando a nosotros mismos, ya que el verdadero perdón a los demás parte realmente del perdón a uno mismo, ya que es un pensamiento de culpabilidad que guardamos sobre nosotros mismos que proyectamos en nuestro hermano.

Es solo bajo esta perspectiva que es posible deshacer el error de culpar a otros, o culpar los eventos en nuestra vida, por nuestros errores de decisión, y así poder observar que cada relación que se presenta en nuestra vida nos está brindando la oportunidad de aprender una lección de perdón, que cada persona con quien nos encontramos en el camino nos está ofreciendo la oportunidad de elegir entre la proyección o el perdón, entre experimentar relaciones santas o relaciones de amor-odio especial, entre la separación o la Unidad , entre el miedo o el amor incondicional. 

El proceso de perdonarse a sí mismo no es tarea fácil, mas bien es una de las tareas más difíciles que podemos enfrentar, nos saca de nuestra zona de confort en la que hemos permanecido y de la cual no queremos movernos, no queremos revisarnos porque nos da miedo lo que vamos a descubrir en nuestra mente, nos da miedo, en ocasiones casi es pavor, explorar nuestras emociones.

Generalmente cuando decidimos observarnos lo hacemos erróneamente, lo hacemos partiendo de sentirnos culpables y en lugar de solo observarnos nos enjuiciamos, o bíen de sentir que alguíen nos ha negado algo, nos ha quitado algo que queríamos y consideramos que es esto en sí lo que nos hace sentirnos solos y abandonados y, bajo esta perspectiva, el perdonarse a uno mismo puede ser doloroso, angustiante, porque lo queremos realizar bajo una perspectiva de elementos aprendidos en el pasado, de mensajes durante mucho tiempo, tanto que se ha acumulado un gran peso emocional.



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